viernes, 10 de septiembre de 2010

La situación insostenible de los jóvenes

La situación insostenible de los jóvenes

Vanesa Valverde Varela

En una situación de crisis, que se reconoció muy tarde, en la que muchos españoles malviven y los inmigrantes que aquí quedan también; en una situación de cierta inseguridad; en una situación en la que se desarrolló una reforma laboral que por el momento no da resultados; en una situación donde el paro juvenil se come casi el 50% de los desempleados; en una situación donde los cursos de reciclaje y del INEM son impartidos por personas que “saben” tanto como los alumnos; en una situación donde las familias, con menos recursos, para sobrevivir tienen que dedicarse a trabajar tanto el padre como la madre y a padecer la falta de comedores escolares y bibliotecas públicas; ……….no es de extrañar que los padres, que llegan cansados a casa, no tengan tiempo para destinar a la educación de los hijos.

Los que tienen dinero también sufren otras cuestiones compartidas: los cambios de “planes educativos” que cada gobierno realiza, las políticas de familia y familias que las desequilibran, un consumismo total, el figurar en una sociedad que obliga a delegar el cuidado y educación de sus hijos en personas con otras costumbres sociales y valores distintos, eso sí con salarios más bajos, lo que permite presumir de “chacha”. Luego si el “niño” no le sale bien dicen que es muy cómodo, que le falta interés, que si los juegos y maquinitas lo traen loco, que si los profesores y los profes particulares ya no son lo que eran, etcétera. Mientras ellos, los chicos, acusan a sus padres de no estar al loro y otros de la falta de comunicación,…… ¡Pero es que ni se ven! Los padres no saben si toman o no drogas, con quién andan o salen, si forman parte de pandillas o de los guarismos del absentismo escolar, etcétera.


Por otro lado los profesores, en los que se delega la educación “integral” por los motivos antes expresados, sufren la violencia que en muchos casos se produce en las aulas y en los recintos escolares generándole miedo, impotencia y frustración. Si lo comentan con la familia de los violentos, esta acusa al profesor, al sistema o se declaran impotentes ante tal comportamiento. Incluso dicen que la ley no le permite “tocar” a los niños “que se las saben todas”, etcétera, etcétera. Esta es una parte del panorama.

¿Qué nos espera a los que hemos terminado los estudios?

La otra tan o más importante es la que sufrimos todos los que hemos terminado una carrera o la formación profesional –en instituciones que carecen de Bolsa de Empleo-, después de escuchar durante años a los papás de que ahí estaba el porvenir, nos encontramos que la realidad es estar en las colas del paro esperando un empleo que no coincide con lo estudiado, mal pagado y temporal, en el mejor de los casos siempre que encuentres un empleo.

Esta es la realidad en Vigo, Galicia y España. El resto son cuentos políticos para rellenar páginas de periódicos adoctrinados. Claro que siempre te queda el recurso de salir de aquí como lo hicieron nuestros antepasados, haber si en otro país te aplican el plus que aquí le concedemos y nos consideran como emigrante o miembro de una etnia y así tener los derechos que aquí se le niegan a los “payos” nacidos en España. Para ir cogiendo experiencia podemos empezar por ir a la vendimia francesa, por qué la de aquí está copada por la mano de obra barata legalizada o por los ilegales.


Mientras tanto queda, también, la posibilidad de incorporarte al pesebre de algún partido político y cumplir fielmente como oveja las ordenes del “buen pastor”. Por qué está claro que vivimos en un estado democrático, del bienestar, de derecho, progresista y de múltiples oportunidades según se vendió estos días en China, a los que creo que no habrán engañado como chinos. Eso queda para el consumo interno tan acostumbrado como estamos a “comprar ficción y fábulas”.

No hay comentarios: